LEER ES UN PLACER

Leer es un placer
Publicado el: 12-Octubre-2009
Dicen que el mexicano no lee. No están lejos de la verdad.
La Encuesta Nacional de Prácticas y Consumo Culturales que solicitó el Conaculta a la UNAM en 2005, reveló que de cada 10 mexicanos mayores de 15 años, seis leen cuando menos un libro al año. Lo malo es que los otros cuatro no leen ninguno.
En cambio, en el país se consumen miles de melodramas de televisión, comedias y programas que incentivan muy poco el intelecto y la imaginación, y que no ofrecen ventajas reales al espectador.
Esta es una costumbre que sólo puede ser reemplazada por otra más constructiva y enriquecedora: el hábito de la lectura, que debe ser inculcado desde la infancia.
“Es una falla histórica en la educación en nuestro país, pero nunca es tarde para empezar a leer y volverse un lector ávido”, afirma el director de las carreras asociadas a la Humanidades de la UDEM.
Leer produce muchos beneficios: es económico, puede hacerse a cualquier hora y casi en cualquier lugar. Sólo se necesita un libro y un lector. La lectura es una excelente compañía, una gran consejera y un refugio seguro para la inteligencia y el corazón.
Puedes viajar al pasado o al futuro, al otro lado del mundo, conocer a personajes históricos o ficticios, y puedes vivir múltiples experiencias. Y tú siempre tienes el control sobre la voz, vestiduras y facciones de los personajes, así como de los aromas, los sonidos y los colores.
La lectura hace pensar, da qué pensar, y eso hace mejores personas.
Si aún no has caído en este hechizo, empieza por hacerte de un libro. Si lo compras, lo consigues prestado, te lo sacas en una rifa o te lo regalan, las diferencias en la forma de obtenerlo se desvanecerán apenas te sumerjas en el siempre nuevo placer de la lectura.
La lectura permite desarrollar la imaginación hacia otro tipo de terrenos, construir escenarios, y ese ejercicio permite desarrollar otras capacidades como la concentración y la creatividad. Permite expandir mucho más el conocimiento y aprovechar mucho más las plataformas de entretenimiento, como la televisión, el cine o el Internet.
“Pero también te hace una persona más culta, lo cual a su vez te hace un mejor ciudadano, y eso te ayuda a aspirar a ser una mejor persona.
“La lectura da capacidad de pensamiento crítico y mayor discernimiento, permite desarrollar la memoria imaginativa y emotiva, y la capacidad de fantasear, agrega.
“Y por si fuera poco, todo esto hace a la persona más competitiva laboralmente”.
Es una gran oportunidad para conocernos a nosotros mismos, y vernos en los otros a través de los personajes. Eso incita la fantasía y enriquece enormemente nuestras habilidades como personas, porque en ello vizualizamos y entendemos mejor nuestros problemas, nuestra realidad, nuestra condición, frustraciones incertidumbres y temores.