El Plan de Desarrollo de Peña Nieto
Se aproxima la fecha en que el Presidente de la República (previa consulta democrática, según dicen la Constitución y su ley reglamentaria en la materia) debe expedir el Plan Nacional de Desarrollo, que se propone hacer girar en torno a cinco ejes estratégicos:
1. “Lograr un ‘México en Paz’, trabajando en una estrategia nacional para reducir la violencia. Con una real y eficaz coordinación entre órdenes de gobierno, a fin de combatir la impunidad y que prevalezca (sic) la justicia y la paz”.
2. “Lograr un “México Incluyente”, combatiendo la pobreza y cerrando la brecha de desigualdad social que aún nos divide. El objetivo es que el país se integre por una sociedad de clase media con equidad y cohesión social e igualdad de oportunidades”.
3. “Lograr un México con ‘Educación de Calidad para Todos’. En este sentido, el objetivo es que las escuelas formen individuos libres, responsables y activos; ciudadanos de México y el mundo, comprometidos con sus comunidades”.
4. “Lograr un ‘México Próspero’, que permita aprovechar los recursos naturales de manera sustentable y agregarles valor, para que su producto llegue a los bolsillos de los mexicanos de hoy y de mañana, que son los dueños de esa riqueza. Asimismo, el Presidente Peña Nieto busca hacer más para acelerar el crecimiento económico: Fomentar la competencia en todos los ámbitos de, aumentar el crédito para financiar áreas estratégicas y promover la economía formal.
Finalmente, busca impulsar todos los motores del crecimiento. El campo, el turismo y el desarrollo industrial, serán imprescindibles en la ruta de México para transformarse en una potencia económica emergente”.
5. “Lograr que ‘México sea un Actor con Responsabilidad Global’. El Presidente Peña busca honrar el lugar que México históricamente ha tenido en el concierto de las naciones, como un país solidario y comprometido con las mejores causas de la humanidad”.
Ése es el marco, según un texto promovido en las redes por la Secretaría de Relaciones Exteriores, en el que quedará encuadrada la agenda de las políticas públicas durante el sexenio gubernamental que inició el pasado diciembre.
En principio, hay que decirlo, se antoja que “son todos los que están”, aunque se echa de menos que, en esa educación de calidad, no se haga el énfasis debido en la formación cívica y humanista que tanta falta hace en este país. Si se quiere llegar a construir un México que sea un actor con responsabilidad global, tendríamos que empezar por casa, y difícilmente desarrollaremos sentido de responsabilidad social sin la debida formación cívica. Nunca se insistirá suficientemente en ello.
También hay que decir, sin duda, que “no están todos los que son”, porque se siente el vacío correspondiente a los derechos fundamentales que, incluso por mandato constitucional, deben ser, no sólo respetados y garantizados, sino también protegidos y promovidos por “todas las autoridades”, especialmente cuando es éste un renglón en el que México es todavía deficitario.
Más específicamente, incluso habría que hacer hincapié específicamente en algunos de esos derechos, respecto de los cuales la urgencia fuera mayor, como podrían ser los relativos a la equidad de género, por ejemplo.
En todo caso, independientemente de los foros que se anuncia serán convocados, en el sitio “http://pnd.gob.mx/#foros” http://pnd.gob.mx/#foros se puede acceder al portal de la “Consulta Ciudadana en Línea”, para hacer aportaciones en torno a esos ejes, que todavía podrán -éste es el momento para proponerlo- ser enriquecidos, matizados o modificados, y para ello la opinión de la sociedad civil -que tendrá que ser ella misma un actor relevante en todo el proceso de diseño, ejecución y evaluación de todas las políticas públicas- es fundamental.
Hay que aprovechar esa vía para cumplir con el propósito de ser “proactivos” y no “reactivos”. También en los foros, para que ellos no se conviertan, como ha ocurrido en el pasado, en pasarelas para el lucimiento de algunos servidores públicos, con poco provecho en cuanto a la definición democrática del Plan.
1. “Lograr un ‘México en Paz’, trabajando en una estrategia nacional para reducir la violencia. Con una real y eficaz coordinación entre órdenes de gobierno, a fin de combatir la impunidad y que prevalezca (sic) la justicia y la paz”.
2. “Lograr un “México Incluyente”, combatiendo la pobreza y cerrando la brecha de desigualdad social que aún nos divide. El objetivo es que el país se integre por una sociedad de clase media con equidad y cohesión social e igualdad de oportunidades”.
3. “Lograr un México con ‘Educación de Calidad para Todos’. En este sentido, el objetivo es que las escuelas formen individuos libres, responsables y activos; ciudadanos de México y el mundo, comprometidos con sus comunidades”.
4. “Lograr un ‘México Próspero’, que permita aprovechar los recursos naturales de manera sustentable y agregarles valor, para que su producto llegue a los bolsillos de los mexicanos de hoy y de mañana, que son los dueños de esa riqueza. Asimismo, el Presidente Peña Nieto busca hacer más para acelerar el crecimiento económico: Fomentar la competencia en todos los ámbitos de, aumentar el crédito para financiar áreas estratégicas y promover la economía formal.
Finalmente, busca impulsar todos los motores del crecimiento. El campo, el turismo y el desarrollo industrial, serán imprescindibles en la ruta de México para transformarse en una potencia económica emergente”.
5. “Lograr que ‘México sea un Actor con Responsabilidad Global’. El Presidente Peña busca honrar el lugar que México históricamente ha tenido en el concierto de las naciones, como un país solidario y comprometido con las mejores causas de la humanidad”.
Ése es el marco, según un texto promovido en las redes por la Secretaría de Relaciones Exteriores, en el que quedará encuadrada la agenda de las políticas públicas durante el sexenio gubernamental que inició el pasado diciembre.
En principio, hay que decirlo, se antoja que “son todos los que están”, aunque se echa de menos que, en esa educación de calidad, no se haga el énfasis debido en la formación cívica y humanista que tanta falta hace en este país. Si se quiere llegar a construir un México que sea un actor con responsabilidad global, tendríamos que empezar por casa, y difícilmente desarrollaremos sentido de responsabilidad social sin la debida formación cívica. Nunca se insistirá suficientemente en ello.
También hay que decir, sin duda, que “no están todos los que son”, porque se siente el vacío correspondiente a los derechos fundamentales que, incluso por mandato constitucional, deben ser, no sólo respetados y garantizados, sino también protegidos y promovidos por “todas las autoridades”, especialmente cuando es éste un renglón en el que México es todavía deficitario.
Más específicamente, incluso habría que hacer hincapié específicamente en algunos de esos derechos, respecto de los cuales la urgencia fuera mayor, como podrían ser los relativos a la equidad de género, por ejemplo.
En todo caso, independientemente de los foros que se anuncia serán convocados, en el sitio “http://pnd.gob.mx/#foros” http://pnd.gob.mx/#foros se puede acceder al portal de la “Consulta Ciudadana en Línea”, para hacer aportaciones en torno a esos ejes, que todavía podrán -éste es el momento para proponerlo- ser enriquecidos, matizados o modificados, y para ello la opinión de la sociedad civil -que tendrá que ser ella misma un actor relevante en todo el proceso de diseño, ejecución y evaluación de todas las políticas públicas- es fundamental.
Hay que aprovechar esa vía para cumplir con el propósito de ser “proactivos” y no “reactivos”. También en los foros, para que ellos no se conviertan, como ha ocurrido en el pasado, en pasarelas para el lucimiento de algunos servidores públicos, con poco provecho en cuanto a la definición democrática del Plan.
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